En los primeros 37 días del año se han reportado varios hechos delictivos en la ciudad de Quetzaltenango y municipios, tanto crímenes como robos de vehículos de dos y cuatros ruedas, además de constantes asaltos.
El repunte de estos hechos son atribuidos por el gobernador departamental de Quetzaltenango, Julio César Quemé, a diversos factores, entre ellos a que delincuentes de otros departamentos, principalmente de la capital, migran a la ciudad altense, “en lugares como Mixco y Villa Nueva ha habido despliegues fuertes de operativos contra la delincuencia y tenemos conocimiento que los delincuentes han migrado al departamento, ante ello las unidades especializadas como Deic (División Especializada en Investigación Criminal) y el Programa Panda están verificando el posible ingreso de estas personas”.
Agregó que otro problema que se da es que se ha quedado estancada la recalibración de antenas, así como el envió de equipo de escaneo corporal que había ofrecido el Sistema Penitenciario, para evitar que salgan llamadas de extorsión desde la Granja Penal Cantel.
Quemé explicó que han solicitado 300 agentes para Quetzaltenango, de la promoción que esta por graduarse. “Nos han indicado que podrían será 100 los que envíen, pero confiamos en que sean los que se solicitaron”, refirió.
Carlos Castañeda, jefe de operaciones de la PNC, dijo que el principal problema delictivo en la ciudad son las extorsiones.
En cuanto a los homicidios, indicó que en enero de 2018 se habían reportado 18 casos, mientras que este años suman 13 en el mismo mes, “la incidencia es a la baja”, comentó.