Desde hace más de 10 años, las empresas deben tener a su disposición el Libro de Quejas, con el fin de mejorar la relación entre el consumidor y el proveedor, esta es una herramienta que nació en el artículo 17 de la Ley de Protección al Consumidor y Usuario, Decreto 006-2003.
Laureano Aguin, delegado de la Diaco en Quetzaltenango, expone que las quejas más comunes en el departamento están relacionadas con los servicios, como el de energía eléctrica y agua potable, seguido de inconformidad con cobros extra en el sector educativo privado, el servicio de telefonía y problemas crediticios en los bancos; además existen problemas con comercios por productos defectuosos.
Para interponer una queja es necesaria una constancia de que se adquirió el servicio o producto, y así le den seguimiento. Aguin explica que cuando son anónimas “no se puede lograr mucho” para resolver el problema.
Proceso
Los encargados del negocio tienen ocho días para dar una respuesta al consumidor, en caso no la haya, se interpone la inconformidad, de forma clara y razonable, se llena el libro en donde se escribe el caso, pero también existe un área para que la empresa dé la solución, si la respuesta es favorable, se cierra el caso.
Laureano Aguin resalta que en el país no hay cultura para resolver problemas, se dejan pasar sin buscar solución, es por eso que buscan ese acercamiento entre los clientes y proveedores, para que a través del libro se resuelvan las dificultades, y que sea un apoyo para mejorar el servicio, pero a la vez que haya respeto al consumidor para que no se violenten sus derechos.
Las cosas que debes saber sobre este proceso
Para darle seguimiento a tus denuncias puedes llamar al 1544, o envía un mensaje de texto al mismo número con las palabras “quejas” o “precios”, para hacer las consultas. En Xela la sede de la Diaco está ubicada en la 7ª. calle 29-25, zona 3, en uno de los ingresos de la terminal Minerva.