El 2 de febrero de este año, a las 18 horas, un grupo de seis trabajadoras de la municipalidad de Quetzaltenango se dispuso a utilizar el Salón de Honor, para realizar un baby shower a una compañera. Sin embargo, una de ellas publicó las fotografías del evento en sus redes sociales, lo que desencadenó rechazo en vecinos debido a que el lugar está destinado para actividades protocolarias y su uso es restringido por los daños estructurales que presenta.
El caso fue conocido en el Concejo y trasladado a la Dirección Municipal de Recursos Humanos, donde el viernes reciente, las organizadoras, junto con el encargado del salón, fueron citados para rendir sus declaraciones. Mario Solís, jefe de recursos humanos, explicó que las empleadas aceptaron haber planificado la actividad y ninguna de ellas presentó alguna nota o carta de las autoridades ediles, donde se avalara la utilización de las instalaciones para ese evento, por lo cual procederán administrativamente en cada caso.
Sanción
De acuerdo con Solís, se revisará la ficha récord de cada empleado, donde se incluye el encargo del salón, para aplicar la sanción que corresponde. No obstante, indicó que lo que procedería sería un apercibimiento.
El baby shower comenzó a las 18.16 horas y finalizó a las 19 horas de ese día.
Es el segundo caso en que el salón es utilizado para un evento de este tipo, el anterior se llevó a cabo a finales del año pasado.