Este lunes, dos años después de la tragedia, el conductor del bus de Transportes Esmeralda, José Orlando Jeremías Valdez Pacheco, de 22 años, vuelve a sentarse en el banquillo de los acusados para comparecer ante la jueza Perla Nowell, del Tribunal Primero de Sentencia Penal de Quetzaltenango.
Durante el inicio del debate, el Ministerio Público (MP) hizo saber los motivos por los que Valdez Pacheco guarda prisión preventiva por los delitos de responsabilidad de conductores y homicidio culposo.
El MP lo sindica de haber causado la muerte de Daniel Vinicio Puac Xec y de sus hijas Ashly Dominga Puac Xop, de 6 años, y Melany Dayana Puac, de 2, el 12 de enero de 2022 cuando conducía la unidad del servicio extraurbano en el periférico, zona 7, y se pasó al carril contrario, aplastando el vehículo en el que viajaban los fallecidos y sus familiares, además, causando daños a otros automotores y dejando heridas a varias personas.
El propietario del bus, quien es tercero civilmente demandado, declara e indica que la unidad colectiva estaba asignada al papá del sindicado, quien se la entregó a este a pesar de saber que no tenía licencia ni experiencia para conducirla.
José Orlando Jeremías Valdez Pacheco, quien actualmente luce más delgado que cuando ocurrieron los hechos, se abstiene de declarar.El empresario también reconoce que el bus no cuenta con seguro de daños a terceros porque «sale demasiado caro pagarlo».
A la sala de debates también se presentan cinco testigos, entre ellos, el ciudadano que el día de los hechos detuvo a Valdez Pacheco cuando intentaba huir. «Al momento que lo logré detener, me di cuenta de que estaba bajo efectos de licor», refiere.
El juicio continuará mañana y el miércoles; sin embargo, se prevé que la sentencia sea emitida en febrero.