Xelajú MC gozaba de una reputación hace algunas décadas atrás, muchos periodistas de antaño le llegaron a llamar el “Aguerrido Xelajú MC”, porque los jugadores jugaban con mucha gallardía. ¿Y ahora cómo se le podría llamar?
Hubo dos épocas que sobresalen en toda la historia del club, porque tuvieron un factor común, las plantillas tenían en su mayoría jugadores propios, criollos y con identidad, eran personas formadas en casa y eso les daba un ingrediente distinto, ponían garra en cada juego.
Esas dos épocas doradas para los chivos: la primera de 1957 a 1967 (1 ascenso a Liga Mayor en 1957, Campeón Nacional 1962, Campeón de Copa 1963 y por ende Campeón de Campeones ese mismo año, Sub Campeón en 1963, 4to. lugar en el Torneo Internacional CONCACAF en 1963, Sub Campeón Nacional 1966 y 1 Campeonato de goleo en 1967.
La segunda época fue un poco más corta de 1979 a 1982: ascenso en un solo año a Liga Mayor en 1979, Campeones Nacional 1980, Sub- Campeones Nacionales 1981 y Sub Campeón de Centroamérica en 1982.
Estas dos épocas las subrayamos con más tinta que los títulos de 1996, 2007 y 2012, a este último resaltar el pase a siguiente ronda de CONCACAF.
Aunque había jugadores no nacidos en Quetzaltenango, pero tomaron una identidad tal que después ellos mismos decían que eran hijos adoptivos de acá, por el amor que le tomaron a la afición, tierra y equipo. En la primera época toda la columna vertebral era formada en la juvenil del club, “Flaco” Ralda, “Canche” Pérez, Juan Reyes, Aníbal de León, Cotí Díaz, Obdulio “Chino” Fajardo, Haroldo Juárez Mancilla, “Chacatay” López, “Zurdo” Cifuentes, Ramón Aparicio, Etc.
Si se dieron cuenta ya van 10 jugadores criollos y eso que aún faltan, en la segunda época destacaban: Chaly Coyoy, Tula Oliva, Fredy Ovalle, Romeo Tello, Miguel Gustavo Pérez, Carlos “Paloma” Valdez, René Morales, Sergio Marroquín, Marco Tulio Ríos, Domingo Calderón, Eduardo Estrada… acá ya van más de 10 jugadores otra vez y en ambas épocas entre equipo base y cambios , en esas épocas reforzados con algunos nacionales de buen nivel y no digamos los extranjeros que marcaban diferencia.
Los últimos procesos en estos 20 años los han hecho seriamente 3 equipos, primero fue Municipal con el argentino Luis Grill Prieto y de allí salió la base del pentacampeonato, oscilando entre el año 2001 al 2004, con Plata, Acevedo, Albizuris, Romero, Ruano, Fredy García, “Pando” Ramírez, Girón, Sergio Guevara, etc., culminando con la venta de jugadores al extranjero como Carlos Ruiz y Marco Pablo Pappa.
Enzo Trosero fue quien ser llevo los laureles, aunque también tuvieron que ver Cordero y Almeida, pero este proceso más tuvo que ver el reclutamiento de talentos jóvenes en otros equipos y algunos de formativas, pero fue exitoso.
Ya el segundo ejemplo si fue producto de las canteras o juveniles, en el Hexa Campeonato de los Cremas, ellos se llevaron a Luis Grill Prieto como director de Fuerzas Basicas, es allí donde nace una dinastía de jugadores propios, como «Moyo» Contreras, Jorge Aparicio, Kendell Herrarte, Jose del Águila, Jairo Arriola, Jorge Vargas, Bryan Ordoñez y complemento de Jean Marquez Castillo que llegaron de Jalapa por el Gerente Deportivo en ese entonces Walter Ormeño quien era el encargado de ver partidos en varias ligas para buscar talento.
El tercer ejemplo fue el de Pineda Lam con Marquense, haciendo un proceso de reclutamiento en el 2005 de jóvenes en todo el país, hizo casa club y los llevó a dos finales y dos subcampeonatos, hasta participar en el 3er. Lugar copa UNCAF (2006) y CONCACAF ante el Pachuca de México en cuartos de final (2007), de ese proceso salieron futbolistas jóvenes como Jorge Mario Ortiz, Brandon de Leon, Frank de León, Francisco Aguilar Peña, Lucas Meoño, Carlos Quiñonez, Nestor Martinez, Kevin Norales, etc., estos fueron los últimos 3 procesos serios en los últimos 20 años en Guatemala, los demás equipos andan intercambiándose los mismos jugadores año con año, sin llegar a ningún puerto seguro.
La actual junta directiva tiene en proyecto, tomar más en serio los proyectos de categorías inferiores, el tiempo que tienen aún es para diseñar un buen proyecto ya que entregarían hasta marzo del 2025.
Contratarán dos personas claves para re-estructurar al equipo, a un Coordinador de Inferiores y a un Gerente Deportivo, el primero para que realice una línea y estilo de trabajo para que todos jueguen con la misma filosofía y que a cada año por lo menos preparen de 2 a 4 jugadores provenientes de categorías inferiores, paralelamente ir preparando y puliendo a juveniles que tengan las capacidades, para irlos encaminando a la carrera profesional en el alto rendimiento y el segundo para buscar talentos en otras ligas o torneos juveniles, como también el canal de comunicación entre la Directiva y el cuerpo técnico del equipo mayor.
Ya se está construyendo una casa club por la vía privada que apoyaría al equipo indirectamente, donde tendrán gimnasio y alimentación adecuada, para ir en la búsqueda de talentos en el resto del país, no necesariamente tienen que ser del departamento de Quetzaltenango, hay prospectos en áreas rurales porque han crecido con una pelota en fincas, municipios y lugares lejanos, en cambio el citadino ya ni juega futbol de barrio, menos existen torneos que estimules la masificación de jugadores, los nintendos o juegos electrónicos es ahora la moda o la entretención, el deporte ya pasó al olvido para la mayoría de jóvenes, por tal razón ya no hay prospectos para ningún deporte.
Ojala puedan realizar esa labor, eso no es un gasto es una inversión, que retornará con campeonatos, equivalente a buenas taquillas y hasta la venta de algunos jugadores al extranjero o acá mismo, esa será la mejor inversión que puede apostar el club y llamarse de nuevo el Aguerrido Xelajú MC, como se le conocía en todo el país y Centroamérica, en ese entonces representados por jugadores propios y con identidad.