A mis años, he tenido la “dicha” –así entre comillas-, de vivir los gobiernos desde Carlos Manuel Arana Osorio 1974, hasta el nefasto de Jimmy Morales; todos han sido nefastos para Guatemala.
El discurso de toma de posesión como Presidente de la República del Dr. Alejandro Giammattei, me hizo recordar el discurso de Otto Pérez Molina, es decir, ambos dijeron lo que la gente quería escuchar, en el caso de Pérez Molina, es de sobra conocido el desenlace de tanta demagogia e hipocresía.
Para los más entusiastas, hasta ayer -16 de enero- me imagino que exclamaron ¡Sr. Presidente, ¡tan bonito que iba! En conferencia de prensa nos informó lo que ya sabíamos de sobra, es decir, el robo descarado en la administración de Morales: Nombramiento anómalo de decenas de personas, corrupción total en la SAAS es decir, asignación de guarda espaldas a expresidentes vivos y muertos, asignación de 18 personas para que cuiden de día y de noche a Jimmy Morales, por su puesto, con vehículos, gasolina, comida, nombramientos de personas a cargos diplomáticos para pagar favores políticos –acciones corruptas-, auto destitución de funcionarios a pocas horas de entregar la banda presidencial –esto para ocultar y/o desvanecer cualquier responsabilidad delictiva-, es decir, una verdadera cloaca en el centro del Palacio Nacional. Pero dijo lo que queríamos escuchar, investigará todos los nombramientos hechos a última hora y destituirá a toda aquella persona que demuestre incapacidad o que haya sido nombrado con olor a corrupción, combatirá la corrupción por medio de un consejo de alto nivel, integrado por personas del ejecutivo, así mismo, reiteró su lucha frontal contra los mareros y extorsionistas a quienes llamó “terroristas”. ¡Excelente Sr. Presidente exclamarían los más entusiastas!
Yo, tengo mis dudas, no estoy entusiasmado, no he escuchado en serio, cómo va a combatir la desnutrición, cómo va combatir la causa de la migración hacia Estados Unidos, cómo va a reactivar la recaudación fiscal, para no tener la necesidad de seguir endeudándonos cada año, para cubrir el déficit fiscal, entre otros tantos e importantes temas. Claro, más alguno ya me respondió; por Dios, pero hace 48 horas que tomó la guayaba, otro dirá, démosle el beneficio de la duda, etc., pero, y ¿ya pensaron que el Sr. Giammattei desde hace más de 12 años que ha venido postulándose para la presidencia de la República? No es un neófito en la política chapina.
Tan bonito que iba Sr. Giammattei pero, así como ya nos dijo que va a aumentar cada año el número de efectivos en el ejército -1,500 cada año, su meta es 6 mil-, así como está preocupado por atraer inversiones por medio de proyectos como minas e hidroeléctricas, “legalizando” las consultas comunitarias por medio de un reglamento, así como, en menos de 48 horas decidió romper relaciones diplomáticas con Venezuela –supongo fue una orden que le dio el secretario general de la OEA-, así señor Presidente, nos urge que envíe una iniciativa de Ley para cancelar el Parlamento Centroamericano, le recuerdo, ese fue uno de sus promesas de campaña, y como usted se pudo dar cuenta, es una pocilga, refugio de corruptos y de los verdaderos mareros y extorsionistas que han matado a miles y miles de guatemaltecos, se han robado el presupuesto de hospitales, de escuelas, entre otros.
Es inaudito, un PARLACEN que se dispuso a abrir de par en par sus puertas, a altas horas de la noche, para recibir con aplausos a los delincuentes de cuello blanco, que dos horas antes y a sus espaldas señor Presidente, cometieron sus fechorías, por Dios, eso no puede seguir pasando en pleno siglo XXI; ¡Nos urge esa iniciativa de ley! Desde hace mucho rato hemos exclamado, no más recursos para el Ejercito, urge EDUCACIÓN, SALUD y SEGURIDAD.
Contador público y auditor, docente universitario y ex alcalde comunitario.