Este 4 de febrero se realizarán las elecciones en Costa Rica, más de 3.2 millones de costarricenses están convocados a las urnas para elegir presidente y 57 diputados. Los aspirantes a presidente necesitan el 40 % de votos de la población para ganar en primera vuelta. Sin embargo, ninguno de ellos se acercan al número mínimo para ser electo.
Con las elecciones en Costa Rica, este 4 de febrero, se inicia la agenda electoral programada en Latinoamérica para 2018, de la siguiente forma: para febrero Costa Rica, en abril Paraguay, en mayo Colombia, para junio México y para octubre Brasil y Venezuela.
De acuerdo con la mayoría de encuestas publicadas por los diarios locales de Costa Rica, coinciden en la preferencia hacia cuatro aspirantes como los favoritos para la población. El candidato social demócrata del Partido Liberación Nacional (PLN), Antonio Álvarez Desanti; Fabricio Alvarado Muñoz, del partido Restauración Nacional (PRN); Juan Diego Castro, del Partido Integración Nacional (PIN), y Rodolfo Piza, del Partido Unidad Social Cristiana (USC), sin embargo, ninguno de los cuatro llega al mínimo del 40 % de los votos requeridos para ser electo como presidente, siendo el mayor porcentaje del 16 % de favoritismo para unos de los candidatos, existiendo hasta el la fecha en que se realizó la encuesta, un 27 % de indecisos, por lo que es muy probable una segunda vuelta electoral a realizarse en abril.
Será interesante ver de qué manera se realizan las elecciones en estos países, y conocer las preferencias de los votantes, para determinar si las preferencias hacia los candidatos electos será la solución a los diferentes problemas que agobian a estos países. Siendo principalmente para Costa Rica la búsqueda de compromisos para mejorar la situación económica en las áreas fiscales y de empleo. La corrupción también es un problema que ha sobresalido en los resultados de las encuestas.
En el caso de Costa Rica, las repercusiones preelectorales ya están golpeando al país de diferentes formas, tras conocerse las preferencias de los votantes, en los últimos días los bonos en la bolsa de Nueva York de Costa Rica, registraron la mayor caída de los últimos ocho meses. También ha puesto en contra las opiniones de los votantes, al conocer que el candidato evangélico Fabricio Alvarado, del PRN, dijo que, de llegar al poder, retiraría a Costa Rica de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH), luego de que esta se pronunciara en autorizar matrimonios en personas del mismo sexo. El candidato del PLN, Antonio Álvarez Desanti, también ha creado controversia durante los periodos que fungió como funcionario, al oponerse a la celebración de un congreso lésbico en el país.
Al parecer, las preferencias de los costarricenses están influidas por los candidatos conservadores, a pesar de que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) ordenó a las iglesias católicas y evangélicas abstenerse de difundir manifiestos de apoyo. ¿Estamos frente a una nueva tendencia conservadora en las preferencias de los votantes? Queda esperar y conocer los resultados oficiales el próximo domingo.