En 2019 el Ex ministro de Educación apadrinado por el ex presidente firmaron la homologación de un pacto colectivo con el Sindicato de Trabajadores del Ministerio de Educación que pone en un gran riesgo las finanzas no solo de esa cartera sino de todo el país. En dicho pacto colectivo se contempla entre otras prebendas un aumento del 15% al salario, de los cuales el año pasado se dio el 10% y para 2020 el 5% restante.
Ese aumento tendrá un costo de 600 millones de Quetzales que saldrá de los impuestos que pagamos todos los guatemaltecos, ese no es el problema, el problema es que el Mineduc ha decidido tomar el presupuesto que estaba destinado al pago de salario de los meses de octubre noviembre y diciembre para pagar los salarios de los primeros meses del año, con lo que se desfinancia el último trimestre y se corre el riesgo de que suceda lo mismo que en la Procuraduría de Derechos Humanos en donde no se tuvieron los recursos financieros suficientes para el pago de salarios a fin de año.
Además de las medidas de forma que tomará el MINEDUC para solventar el pago de salarios, existen elementos de fondo que deben ser considerados, ya que el Decreto Número 101-97, Ley Orgánica Del Presupuesto y sus reformas, articulo 26, establece literalmente: Límite de los egresos y su destino. No se podrán adquirir compromisos ni devengar gastos para los cuales no existan saldos disponibles de créditos presupuestarios, ni disponer de estos créditos para una finalidad distinta a la prevista. La contravención a esta disposición es punible penalmente, constitutivo de los delitos de abuso de autoridad, incumplimiento de deberes y de los demás delitos que resulte responsable.
En base a la norma citada, el MINEDUC no podía comprometer más recursos de los que tenía, sin tener la certeza de si recibiría o no más asignación presupuestaria, ya que es totalmente inaceptable que se comprometan recursos públicos solo por compromisos políticos, es por ello que procede poner las denuncias correspondientes para investigar la forma en que se negocio dicho pacto, con esos Q600 millones que se auto aumentaron en el pacto colectivo cuanta medicina y equipo podría adquirirse para hospitales, o cuantas escuelas podrían raparse.
No basta con ampliar el presupuesto para cubrir el déficit o recortar otras partidas para cubrir salario; se debe hacer un examen exhaustivo del personal que realmente cumple con sus labores, horarios, metas y planes, ya que así como en el gremio magisterial hay buenos elementos, también hay innumerables quejas de maestros que no llegan a dar clases, llegan parcialmente, tratan mal a los niños, no cumplen con el contenido mínimo e incluso llegan en estado de ebriedad, razones por las cuales es urgente establecer si todos cumplen con sus labores, si hay exceso o sobrepoblación de personal e implementar controles internos que permitan establecer la existencia de plazas fantasmas o plazas innecesarias en la administración. A nivel del ejecutivo se deben tomar medidas urgentes sobre la firma de pactos colectivos nuevos para que no queden a discreción de funcionarios que irresponsablemente comprometan los recursos públicos a su antojo habiendo tantas necesidades insatisfechas para la población en materia de salud, educación, etc.