No había necesidad de hacer el ridículo, ni la víctima menos defender lo indefendible, y qué pena para los guatemaltecos honestos, con vergüenza y con pudor, al escuchar a Jimmy Morales diciendo una y otra vez, “mi país”, ante la Asamblea General de las Naciones Unidas. Una vez más, qué vergüenza ser representados por una persona de singular desfachatez.
Sin duda, Jimmy Morales y sus correligionarios –pacto de corruptos-, creen que están en la era del hielo, creen que la comunidad internacional –ONU- no están enterados de los desmanes y desmadres que están provocando y haciendo todos los días en Guatemala. Hasta la fecha, el señor presidente prácticamente se ha convertido en el “presidente encargado de la república de los corruptos”. El discurso pronunciado en esa asamblea tuvo una duración de 26 minutos, de los cuales, utilizó once minutos con diez segundos para hablar de la CICIG, por supuesto, no habló maravillas del trabajo realizado por esa comisión internacional contra la corrupción e impunidad, no, desembocó su ira, su enojo contra el trabajo de dicha comisión y por supuesto, contra su último comisionado –Sr Iván Velásquez- y la ex fiscal general y jefa del Ministerio Público –Sra. Thelma Aldana-.
Pregunto: ¿En verdad, Jimmy Morales y su equipo creen que los asambleístas ahí presentes no tienen conocimiento de la realidad económica y socio política de nuestro país? Para los que no tenemos problemas con la corrupción, el trabajo hecho por la CICIG ya es historia, nos queda asumir nuestra responsabilidad y seguir luchando día a día contra ese mal; sin embargo, para los corruptos ese trabajo los alcanzará tarde o temprano, incluso, hasta su cuarta generación, ese es el verdadero miedo que tienen y por eso, están haciendo hasta la imposible para asegurarse impunidad a través de la cooptación del Estado, como muestra un botón, ese mismo día –miércoles 25 de septiembre-diputados corruptos, crearon la Comisión Anticicig.
Y la pobreza, la desnutrición, el analfabetismo, la inseguridad es decir, el Índice de Desarrollo Humano del guatemalteco en relación con el mundo, jamás fue mencionado en el discurso, mientras el Sr. Morales se quejó en toda su intervención, el excelentísimo señor Presidente de la República de El Salvador Sr. Nayib Bukele -su intervención duró diez y seis minutos con cinco segundos-, su discurso fue soberbio y contundente, indicando que, “el formato de la ONU es arcaico, debe cambiar, porque el mundo cambió y está cambiando”. Entre otras cosas dijo, no es necesario venir una semana a Nueva York a la sede de la ONU, descuidando trabajo y gastando recursos económicos para participar a una Asamblea General, propuso entre otras cosas, que cada presidente envíe su discurso a través de una plataforma virtual, así cada gobierno, se evitará tanto gasto de recursos económicos. Aplaudo una y cien veces lo dicho por Nayib Bukele, no fue a quejarse, fue a proponer soluciones viables, no solo para su país, sino para el mundo.
Regresando a nuestra realidad, por qué tenemos que pagarle boletos, comida, hoteles y toda clase de caprichos al presidente y su sequito de corruptos para asistir a una Asamblea de la ONU. Cuánto cuesta generar ganancias en un negocio, sea éste, micro, pequeño, mediano o grande, y luego pagar los impuestos para que éstos vividores –funcionarios corruptos-, se lo malgasten viajando y comiendo como reyes. Estimado lector, ¿Hasta cuándo y hasta dónde vamos a permitir que nuestros impuestos pagado a las arcas del Estado, pare en el bolsillo de sinvergüenzas y no para suministros de hospitales, escuelas, ambulancias entre otras necesidades?
Contador público y auditor, docente universitario y ex alcalde comunitario.