Al parecer, porque no está comunicado como debe ser, la Municipalidad de Xela le quiere dar una sorpresa a los quetzaltecos con la regularización de la tarifa de energía eléctrica.
Sarcásticamente o enojado, como suele responder el alcalde de Xela, Luis Grijalva, dijo que, si querían, la regularización podría ser tomado por los vecinos como un regalo navideño de su gobierno. Antes de decir semejante cosa, lo que debe dejar claro es qué decisión se tomó y si es a nivel de Concejo o solo de alcaldía. Vamos a estar atentos, en estos días, a pesar de ser de emotividad, para que no le “metan un gol a la población”.
Se recordarán ustedes que, en los gobiernos anteriores, mientras las personas pensaban en los tamales de Navidad, en la terminal Minerva gente sin escrúpulos, se dedicaba a construir locales comerciales ilegales. Pues en estas fechas no se debe permitir ni tolerar que tomen decisiones unilaterales. Si bien el Concejo está facultado para hacerlo, debe ser acorde a la realidad y que la estandarización de tarifas sea del pleno conocimiento del pueblo.
Al gobierno local lo ha estado presionando el Instituto Nacional de Electrificación (INDE) para regular la tarifa y pagar la deuda, algo que es inevitable, pero, en qué condiciones; en qué plazos y cuánto significa al bolsillo familiar y comercial esa regularización de la tarifa.
Si el alcalde Grijalva hace las cosas poco claras o sin consensos, lo más seguro es que le pasará lo mismo que con el Plan de Ordenamiento Territorial que ya fue rechazado y está varado, además, le recordamos que un alcalde del pasado que le subió 5 centavos a la energía, le costó el puesto. Las decisiones deben ser con sentido común y apegadas a la realidad local.