Quiero dedicar esta columna especialmente a ti mujer que en esta pandemia te volviste más creativa, más fuerte y con más fe.
No imaginamos que está crisis daría un giro total a lo que acostumbrábamos a hacer, mujeres que no han podido detener su trabajo porque son las encargadas del sustento del hogar, mujeres que durante esta pandemia han emprendido nuevos negocios y nuevas formas de ingreso. Vi un meme que puso una colega abogada que decía: «en esta pandemia mejor venderé huevos divorciados» algo que no está lejos de la realidad, porque hay profesionales que emprendieron vendiendo diferentes comidas, postres y productos en forma virtual.
Apoyémonos unas a otras, empezando con comprarnos. Amigas maquillistas que han dado curso de maquillaje en línea, amigas abogadas que me han ofrecido empanadas, mascarillas, guantes, helados, pasteles, para todas ellas mi admiración; yo igual que ustedes he emprendido, aunque tenga la bendición de tener un trabajo en esta pandemia, porque no olvido las palabras de mi padre, nunca debemos tener un solo ingreso.
Hemos visto que son más hombres que dan positivo que mujeres, no solo es porque nos cuidamos más, sino porque somos más fuertes ante cualquier enfermedad, se acordarán de los memes con imágenes de la diferencia cuando un hombre y una mujer tienen gripe.
En La Voz de Xela hemos visto y leído interesantes historias de mujeres, como la que abrió un autoservicio de verduras y frutas en su casa, la madre cocinera que pasó a lustrar zapatos y las señoritas que venden tortillas que pusieron el ejemplo al proteger con nylon toda la fachada del local, esto muestra que las mujeres somos creativas.
Mujeres de fe confesemos que la enfermedad Covid-19 no llegará a nosotras, protejámonos sí, pero no vivamos con temor, pongamos nuestra confianza en quien nos ciñe de valor.