La historia de la Quinta Compañía de Bomberos Voluntarios de Quetzaltenango está ligada a varias personas y familias que han dedicado su vida a servir al prójimo.
Sin duda alguna, una de las familias que ha demostrado su amor hacia la institución bomberil y su entusiasmo por ayudar a los demás es la familia Díaz.
Todo inició cuando el mayor de los hermanos, Sergio Antonio Díaz Rivera, decidió hace 30 años iniciarse como bombero motivado por su padre que le inculcó el don de servicio a la patria.
A Sergio le siguió su hermano José Gustavo, quien lleva 17 años en la institución, y posteriormente su hija, Mayra Isabel Díaz Lara, quien cuenta con diez años de servicio.
Ellos se han encargado de inculcar en Daniela Esther Díaz, de diez años, la admiración hacia los bomberos y ella ha expresado su deseo de vestirse de rescatista, al punto de que actualmente integra la brigada infantil.
La más pequeña de la familia, Katherin Nicole, de un año y seis meses de edad, también ha manifestado su interés hacia la institución, por lo cual la visten con los trajes bomberiles para incentivarla.
“En la institución he vivido muchas anécdotas buenas y malas. Recuerdo que para una Semana Santa nos tocó cubrir un accidente en el sector de Pirineos donde murieron 20 integrantes iglesia evangélica y cuatro sobrevivieron. Son cosas duras, pero esta bendita labor nos da la satisfacción de servir al prójimo”, expresó Sergio.
El amor de Sergio por la institución va más allá, él se tatuó en la espalda la imagen de una de las unidades bomberiles y en su habitación cuenta con una gran colección de objetos relacionados con los bomberos.
José expresó que integrar las filas de los bomberos es para él una bendición porque de esa manera puede ayudar a los más necesitados.
Para la esposa de Sergio, Matilde Ixmucané De Díaz, es admirable la labor que él desempeña porque en muchas ocasiones ha dejado todo por salir a cubrir emergencias, sin importarle arriesgar su propia vida.
“Servir a los demás se ha convertido en una herencia familiar y es por ello que mi sueño es que mi hija Katherin siga mis pasos y los de su abuelo“, manifestó Mayra Díaz.