En sesión del Concejo de ayer, el presidente de la Comisión de infraestructura para este año, el síndico primero José Julián Elizondo Guerra, solicitó, argumentando carga de trabajo, que el concejal primero Julio Lima y la concejal quinto María Alvarado se unieran a la comisión que ya cuenta entre sus filas con el concejal suplente Luis Ovalle, la síndico segundo Olga Moscoso, y la concejal segundo Mirta García, lo cual fue aprobado por mayoría de votos.
Otros miembros del cuerpo colegiado señalaron que el trasfondo de la decisión es que el alcalde Luis Grijalva y los funcionarios afines a él tengan el control en las decisiones de los proyectos, al igual que sucede en el Congreso de la República.
Gerardo Yarsebsky, concejal cuarto, expresó que la acción es extraña, porque se trata de políticos totalmente afines al jefe edil. «No comprendo por qué se solicita ampliar de tres a cinco integrantes la comisión. Obviamente es el equipo más cercano y duro del alcalde. Lo que pienso es que como es un año preelectoral van a tomar a la comisión de infraestructura como una catapulta para buscar reelegirse en la municipalidad o en algún otro cargo de elección popular», refirió.
Yarsebsky añadió que otras comisiones que han sido acaparadas por funcionarios afines a Grijalva son las de electricidad y la de transporte, las cuales, según él, corren el riesgo de ser politizadas.
Por su parte, Grijalva negó que se trate de una decisión con fines políticos y aseveró que el objetivo es agilizar la ejecución de obras de infraestructura que beneficien a la mayoría de pobladores del área urbana y rural.
Carlos González, concejal tercero, mencionó que fiscalizarán las acciones de la comisión para garantizar que cumplan con la ejecución de obras.
Hoy, la concejal Mirta García presentó su renuncia a la citada comisión, la cual fue aceptada.