Las ciudadanas María Clara Fernández, de 56 años, y Odilia Farfán, 63, son las fundadoras y directoras del “Santuario Vida Animal Guatemala” que desde el año 1996 brinda una segunda oportunidad de vida a canes que son rescatados de las calles.
El refugio, ubicado en la aldea San José Pacul, Jurisdicción de Santiago Sacatepéquez, rescata animales víctimas de maltrato, abandono e indigentes. Estos animalitos son tratados en sus lesiones físicas y psicológicas. Les brindan atención veterinaria, cuidados las 24 horas, casa y comida, fisioterapias, aromaterapia y masajes relajantes con el objetivo de que puedan superar todos los traumas del maltrato.
María y Odilia están al frente del santuario que cuenta con 700 canes.“Recuerdo que desde que tenía seis años empecé a rescatar perritos. Durante mi adultez sufrí de varias enfermedades que me imposibilitaron seguir trabajando y decidí dedicar mi vida a ayudar a los animalitos; el refugio empezó con dos perros y así fue creciendo vida animal Guatemala. Hace 25 años conocí a Odilia y con ella iniciamos el santuario y actualmente ambas trabajamos para mantenerlo activo”, expresó María Fernández.
María Clara Fernández, de 56 años.Fernández comentó que el santuario funciona en su vivienda y que ha sacarificado su vida, su herencia familiar, su salud y su familia para dar una vida digna a los animales.
Odilia Farfán, de 63 años.El residente más antiguo del santuario es “Mateo”, un perro de raza Golden de 18 años, el cual fue abandonado tras nacer con una deformidad en la cabeza y patas. Sin embargo, actualmente «Mateo» y otros 700 perros, 87 gatos y 60 aves de corral disfrutan de un ambiente sano, seguro, libre de jaulas y limpio para vivir en paz y en comunidad de su misma especie.
Él es «Mateo» el can con más años en el refugio.La organización también realiza jornadas de castración a bajo costo para beneficiar a animales que habitan en los alrededores del refugio.
“La labor que realizamos es titánica porque existen miles de animales que deambulan en las calles y que necesitan ayuda, sin embargo, gracias al aporte de personas solidarias seguimos de pie. Este santuario es mi vida”, concluyó Fernández.
El refugio rescata en algunos meses 12 perros de las calles y en otros la cantidad llega a 60, por lo cual necesita cada quincena de mes alrededor de 70 quintales de concentrado para alimentar a los animales.
En la actualidad el refugio cuenta con la manada canina más grande desde México hasta Nicaragua, solo detrás de otro que funciona en Costa Rica donde habitan 900 canes.
El santuario se sostiene en base a donaciones, para apoyar con alimentos o aportes monetarios puedes comunicarte a los números 52013187 y 55899880.
Conoce en esta galería de fotos a algunos de los animales que viven en el santuario: